Namaquiel es uno de los Guías con los que trabajo en el Grupo de los Nueve.. Su función es ayudar a la Humanidad a recuperar el sentido del amor incondicional. Lo hará enseñándote primero a recordar el amor hacia ti mismo.
Con su energía te ayuda a que te des cuenta de que cuidarte, amarte y respetarte no es tarea de otro, sino de ti mismo. Que no sólo no está mal, sino que además es necesario para tu evolución. Si no te amas, no serás capaz de amar de verdad a otra persona.
Potencia el amor por la vida, por la belleza que existe en todas las cosas. Te trasmitirá que vivir en la Tierra es un privilegio maravilloso que sólo puedes aspirar a comprender cuando te permitas sentir tu propia belleza y valía.
Es uno de los maestros más amorosos y sencillos. Déjate influir por su energía de alegría y amor por la vida. Puedes escucharla en audio o leerla en el post,
pero sobre todo no te dejes la meditación del final :)
Querido amigo te saluda Namaquiel, soy el maestro del amor hacia uno mismo y vengo a mostrarte mi enseñanza.
La enseñanza del amor propio es la primera y más importante para el ser humano, pues es la que le permitirá después mostrar ese mismo amor por otro ser vivo.
Con mi presencia te recuerdo que has nacido del amor, y del amor provienes. No hay nada malo en ello, ni vergonzoso, simplemente hay amor.
En el descenso que hace tu espíritu individual a la materia, dejas en la trastienda las partes de ti más grandes. Aquellas que conocen tu procedencia, que saben de la paz y la calma que conforma tu ser interior.
Y si soy puro amor ¿porqué a veces me siento desgraciado, y siento vergüenza ante los demás? Recuerda mi querido amigo que viniste a experimentar la densidad, y no es posible que lo hagas si recuerdas en su totalidad quien eres. Si recuperases tus partes la experiencia acabaría, y es que aunque eres puro amor no llegas a experimentarte hasta que te retas.
La vida terrenal es un reto que te haces a ti mismo para probarte y experimentar qué harías si olvidases por un instante todo lo que eres y sabes.
Y es por eso que te llevas algunas herramientas que te ayudarán en tu caminar. Una de ellas es la vergüenza, esta emoción te hace sentir pequeño. Cuando eres un niño aparece cuando alguien te juzga y te dice que has hecho mal, entonces nace el sentimiento de que hay algo en ti que no es bueno y que no debería ser así.
Cuando eres adulto aún puede acompañarte en tu vida, mostrará la inocencia del niño si mantienes esa emoción sin mancha, sin odio, sin enfado. Y te servirá para dejar salir aquellas partes de ti que aún se asombran con algo nuevo, que se equivocan, que se tropiezan y caen con mucho estruendo. Y entonces surgirá la risa en su lugar. Es necesaria para recordar al adulto que eres un niño que ha venido a jugar.
Sin embargo cuando se mezcla con otras emociones de confusión, enfado y cólera la vergüenza ya no ayuda al adulto sino que le bloquea en su vida. Es entonces cuando le hace sentirse inferior y sale a relucir el sentimiento de que algo va mal en el, pero esta vez con la comprensión del adulto. Ahí ya no le ayuda a aprender sino tan sólo le hace sentirse mal. Eso genera una reacción en cadena que crea enfado y rabia que terminará en llanto debido a la confusión.
La timidez es otro tipo de emoción más suave que también acompaña al humano en su niñez, para ayudarle a que piense antes de actuar, que sopese la situación y a que sea observador. En el adulto cuando se mantiene activa es porque el humano no ha desarrollado el grado de madurez a través de sus experiencias. Ha quedado atrás sintiendo que no será valorado como debería. No comprende que los demás tan sólo pueden ver lo que el muestra de si, su timidez.
Para recordarte que son tan solo energías y que puedes cambiarlas en este mismo instante he venido yo hoy.
Basta que liberes hoy el miedo a ser como eres, y te aceptes sin juicio, al igual que harías con cualquier otra persona.
En ese momento dejarás de sentir timidez ante los demás, pues ya no la sentirás hacia ti mismo. Para eso he creado un espacio donde mi energía llegue más fácilmente a tu energía, a través de esta meditación.
La vergüenza se disipará si simplemente permites que mi energía del recuerdo de quién eres en realidad pase a través
de ti.
Deja que el recuerdo de tu naturaleza divina te ayude a despertar.
Es momento de que dejes salir parte de tu naturaleza grandiosa y bella. Ya es momento de evolucionar y dejar atrás las trabas. Ellas están ahí para que aprendas y las superes, pero ¿Qué ocurre cuando las mantienes y no hay crecimiento? Que el ser humano se estanca.
Para eso he venido yo hoy. El maestro del amor incondicional que te ayudará a recoger algunas de las partes que dejaste atrás.
Por tan sólo un momento experiméntate completo. Y yo te acompañaré en tu proceso. Acude a mí siempre que sientas timidez o vergüenza y permite que te libere de ella.
En este lado siempre velamos por ti, tu amigo Namaquiel.
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Karen (domingo, 04 noviembre 2018 19:59)
Tal cual era yo hasta hace poco tiempo atrás. Lo estoy superando de a poquito.
Gracias!
Abrazo
Cristina Acebrón Guirau (lunes, 05 noviembre 2018 08:57)
Gracias por compartir Karen, trabajando la meditación del artículo seguro que vas avanzando
Un abrazo muy fuerte!